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Mitos creados alrededor de la alimentación natural

Son muchos los mitos creados alrededor de la alimentación natural, en especial desde los mercados de los concentrados, con el único objetivo de vender sus productos y no de alimentar a nuestros peludos.

Estos son algunos de los más populares con sus correspondientes argumentos para rebatirlos.

¿Mi perro se vuelve agresivo al consumir carne cruda?

No. Un perro no se vuelve agresivo por comer alimentos naturales, este comportamiento es netamente por educación o problemas de conducta previamente adquiridos.

Los perros con este tipo de conductas lo hacen con el objetivo de “proteger sus recursos” y puede ser su alimento, sus premios, sus juguetes ya que lo consideran un bien preciado. Cabe resaltar que tampoco atacarán el ganado por comer dieta B.A.R.F, insistimos esto se debe a situaciones netamente educativas.

¿Al consumir carne cruda, se puede contraer parásitos?

Ante este cuestionamiento hay varios puntos por destacar:

Inicialmente es muy importante que donde adquieran la alimentación B. A. R. F. sea en lugares de confianza y que cuenten con los permisos suficientes para producir y comercializar este tipo de alimentación, en Colombia existen entidades que regulan y realizan controles sanitarios con el fin de evitar situaciones adversas en sus animales y con ello reducir los riesgos de cargas patógenas en el alimento.

Recuerden también que los perros son animales carnívoros y su sistema digestivo está diseñado inclusive para consumir carroña,  su pH ácido y su intestino corto los protege ante la presencia de parásitos, por lo tanto tenemos total tranquilidad de brindarles comida cruda teniendo en cuenta también la recomendación del párrafo anterior.

Por último, siempre sugerimos conservar el alimento en congelación, por precaución y para que nosotros como tenedores responsables estemos más tranquilos.

Los huesos son peligrosos porque se astillan.

Cuando alimentamos con carne cruda a nuestros caninos los huesos van rodeados de carne, diferente cuando los huesos son cocinados, estos pierden su estructura molecular, pierden humedad y se vuelven duros y al partirlos se crean astillas las cuales pueden generar dificultades en nuestros perros.

Es típico de los perros que meten el hocico en la basura y al intentar consumir sobras con huesos cocinados ocasionan muchas de las  urgencias veterinarias, por tal razón es importante que los huesos suministrados seas rodeados de carne y en el caso de los recreacionales de un tamaño adecuado.

Por la trayectoria de nuestra empresa nos hemos cruzado en el camino con muchos veterinarios temerosos de sugerir una alimentación natural y hemos concluido que una de las principales razones es que durante su formación profesional poco se les enfoca en perros y gatos, pero cuando lo hacen, muchas de estas charlas son patrocinadas por diferentes marcas de concentrado. Sin embargo, cada vez hay más, no solo veterinarios a favor de la dieta B. A. R. F. si no dueños de mascotas interesados en brindar una alimentación consiente y natural a sus amigos carnívoros.

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